Alguna vez te has sentido intimidado cuando tienes ante ti a un público listo para escuchar tu predicación? O de pronto postergas la decisión de comenzar a predicar. Créemelo, No eres el único.
Pero hoy quiero hablarte de dos obstáculos que impiden el que tú tengas éxito en la predicación o te han impedido comenzar a dar tus primeros pasos en este maravilloso ministerio. Voy a darte unas Seguir leyendo
De nada te servirán una cantidad de argumentos o técnicas Para Predicar, si no me detengo en esta oportunidad para recordarte que, has sido llamado por Dios con este claro mandato: “Predica la Palabra”. El carácter especial de la Palabra de Dios hace que su proclamador no sea un pregonero común, sino un embajador de Cristo.
“Te encarezco delante de Dios y del Señor Jesucristo, que juzgará a los vivos y a los muertos en su manifestación y en su reino, que prediques la palabra; que instes a tiempo y fuera de tiempo; redarguye, reprende, exhorta con toda paciencia y doctrina.” -2. Timoteo 4:1-2 Seguir leyendo
Si has venido leyendo los artículos que están en este sitio, es sin duda alguna debido a ese ardiente deseo de mejorarte cada día en el arte de la predicación. Posiblemente a esta altura, ya habrás aplicado en tu ministerio de la predicación algunos de los consejos que se te han entregado sobre cómo predicar.
Sin embargo, a veces nos preguntamos lo siguiente, ¿Cómo hacerle para ganarme la atención de mi público y cuando hacerlo? Seguir leyendo
Has estado alguna vez en una reunión donde el predicador era una persona con un enorme conocimiento, pero por alguna razón a los 10 minutos de escucharlo, parecía que caía una nube de cansancio o aburrimiento en todos los presentes? Y no es que el predicador no sea un hombre de Dios o que no tenga experiencia, sino que hay algo de lo cual se ha descuidado, y muchas veces nosotros caemos en ese problema en el transcurso de la Predicación, Y lo que nos hace falta aprender es “Como Predicar Con Entusiasmo” Seguir leyendo
Hablar en público es uno de los temores más comunes de la persona promedio. Algunos han recibido el llamado de Dios para predicar el Evangelio, pero cuando se enfrentan a esa posibilidad, la persona se aterroriza tanto, que comienza a sudar, se le aceleran los latidos del corazón, sus músculos se tensan y hasta sienten dificultad para respirar. Algunos hasta han sentido molestias gastrointestinales.
Estoy exagerando? Por supuesto que no. A lo mejor a ti quizás Seguir leyendo
“Por lo cual, por amor a Cristo me gozo en las debilidades, en afrentas, en necesidades, en persecuciones, en angustias; porque cuando soy débil, entonces soy fuerte. -2 Corintios 12:10
Nadie puede negar el hecho de que las aflicciones, las tribulaciones y las pruebas, son requisitos indispensables para una predicación apasionada. La Predicación es para alcanzar corazones duros y para sanar corazones quebrantados. Como se logra eso? Cuando el Predicador también ha atravesado por su propio valle de aflicción. Seguir leyendo
Recuerdo la primera ocasión que me tocó predicar a mis 17 años de edad (que por cierto, no hace mucho tiempo). Recién había sido nombrado para dirigir a un grupo de jóvenes de la iglesia, y mi Pastor me dice, “muchacho, tienes que predicar el próximo sábado en la iglesia” Sabes, ahora me sonrío, pero te imaginas lo que sentí en ese momento? Si hasta ese momento había sido un chico muy tímido, sentí como si me estaba dando fiebre, me temblaba hasta el cabello.
Como te fue a ti, o como te va a ir el día que vayas a Predicar Por Primera Vez, no lo se. Lo que si sé es que Seguir leyendo
(continuacion) Predicar no es un ejercicio de lenguaje o de oratoria. Cristo Jesús no fue un mero predicador. El amaba a la humanidad, la totalidad de su ministerio fue un constante derramamiento de COMPASION por nosotros. Por ello, las palabras que Jesucristo habló, procedían de una vida profundamente afectada por aquellos a quienes él ministraba. El se identificó con nosotros, sufrió con nosotros y al final murió por nosotros. Seguir leyendo
Justo en este momento en que estoy escribiendo este articulo, y aún durante mis horas de trabajo, algo ha estado vibrando en lo profundo de mi corazón, y es el deber que tengo como predicador de La Palabra, de Tener Compasión por las personas. Y Dios trajo a mi mente el pasaje cuando El Evangelio de Juan en el capítulo 10, nos presenta a Jesús como el “Buen Pastor” Y en el verso 11 el Mismo Jesús nos dice: “Yo soy el buen Pastor; el buen Pastor su vida da por las ovejas” Seguir leyendo
En nuestros países latinos o en algunos de ellos, en la mayoría de las terminales de autobuses se descansa por unos minutos, tiempo que es aprovechado por vendedores de comida, pero también,, de pronto sube uno de esos vendedores de medicina que con una enorme elocuencia dan un discurso describiendo las características y los beneficios de la medicina que venden, lo hacen con una enorme convicción, que muchas de las personas que están dentro del bus terminan comprando el producto, y todo porque el vendedor fue capaz de transmitir el mensaje que quería dar.
No que nosotros los predicadores tengamos que hacerle como esos vendedores, sino a lo que quiero llegar es que cuando se trata de Como Predicar La Palabra de Dios, Seguir leyendo
Enormes habilidades podrá tener un predicador para desarrollar su mensaje, buen manejo del lenguaje, una homilética muy bien aplicada, lo cual es indispensable. Sin embargo, hoy quiero llevarte de una manera sencilla a este punto que es de vital importancia para que al momento que te pares en el lugar en que has de predicar la Palabra de Dios, sepas que “Tu Predicación ha de estar basada en La Guianza del Espíritu Santo”
Es que, debo dejar muy bien claro este punto que cuando hablamos de Como Predicar el evangelio, a diferencia de cualquier otro tipo de discurso, no solamente tienes que estar muy bien preparado en cuanto al tema que vas a desarrollar, utilizar todas las técnicas que se utilizan en cualquier otro discurso,, sino que además,,, Seguir leyendo
Platicando con un amigo cristiano unos dias atrás, él me manifestaba lo molesto que se sentía debido a que cada vez que él iba a su reunión y escuchaba la prédica, parecía como si el predicador estaba siempre enojado, ya que el 80 por ciento de su mensaje parecía que era expuesto con una actitud de enojo.
Este comentario de mi amigo, me hizo recordar que, no importa cuán preparados estemos, ya sea con oración o con una buena preparación bíblica, Nuestra Actitud será lo que va a destacar a la hora de la predicación.
Hoy quiero traerte a tu mente y corazón, dos elementos Seguir leyendo
Técnicas Para Predicar│Cómo Predicar 
